miércoles, 6 de junio de 2012

Mi vida en una receta



 Algunos derechos reservados por action datsun 
Hace poco veía un programa de cocina que hablaba acerca de lo nutritivos que son según qué alimentos...,de la importancia de este y aquel nutriente y de cómo el modo de cocinarlos puede garantizar o no las propiedades nutritivas de todos ellos...

Lo estaba viendo y me daba cuenta que con el alimento ocurre lo mismo que con la comunicación...ni todo lo que decimos es integrado o comprendido por un otro, ni todo lo que como me nutre.

Recordaba la frase de mi compañera y amiga Mayte Lacasa que cogió prestada de no se quién..."no eres lo que comes, eres lo que tu flora intestinal absorbe"...(y no elimina, claro!)

Todo esto lo relacionaba con ese patrón de relación en que se "engullen" las experiencias (al igual que los alimentos)  sin asimilar (y sin nutrirnos, por tanto)...con lo que lo eliminamos de un modo parecido al que lo hemos ingerido. Patrón de relación en el que vamos incorporando ingredientes que nos alejan de  personas y experiencias  nutricias, que deseamos tanto como evadimos...

Cuando esto nos ocurre ponemos en la "ensalada" de nuestra vida ingredientes como estos...
  • Vivir queriendo controlarlo todo...
  • Tener para todo una respuesta...
  • Ser incapaz de sorprenderme de un "otro"...
  • Vivir experiencias significativas y acumular experiencias  que no me calan...
  • Vivir sin dejar que pase el “ a ver qué pasa"...
  • Vivir sin "abandonarme" con un otro...
  • Desear la intimidad de los encuentros,y asustarme la intimidad de los encuentros...
  • Sentirme solo….con frecuencia...

Si conoces esta receta, ocurre que vives “de receta” un modo de vivir en el que pareciera que vivimos plenamente nutriéndonos y sin embargo nos mantenemos impermeables en las experiencias y encuentros con lo que finalmente ocurre (como si se tratara de un programa informático) que no actualizamos (nuestra versión) en cada encuentro o experiencia...y se va haciendo más difícil adaptarse a los nuevos requerimientos sociales (al igual  que a las demandas informáticas...)



Con el pasar de los días este plato se nos indigesta y no nos nutre,nos hace sentir  vacíos, solos, con mucha hambre, deseosos de otro y temerosos de otro, anhelando encuentros y evitando encuentros, preguntándonos qué está pasando y mostrándonos  con una apariencia de seguridad que nos distancia del otro…


AtribuciónNo comercialSin obras derivadas Algunos derechos reservados por Max y Miliano
               


Y así nos procuramos cada día un plato que no nos alimenta...con lo que no podemos crecer. Un modo de no “encontrarme” con otro ni  conmigo mismo, y sí con mi soledad. Alimentándonos sin nutrirnos, eliminando las experiencias (al igual que ocurre con el alimento )sin haberlas asimilado. 





Siempre comiendo y  siempre hambrientos.

Acumulando experiencias sin "vivirlas". Con esa ausencia de encuentros auténticos al que nos referíamos en la entrada "la invención de Hugo" cuando aludíamos a esa paleta de colores que se va actualizando y renovando con cada encuentro auténtico y experiencia plena vivida.                                                   

                 
¿Cuales son los ingredientes de tu receta?¿Qué ingredientes incorporarías para que tu plato resultase más "nutritivo"?


¡Buen provecho!